Formas adecuadas de hacer ejercicio cuando hace frío o calor
- Fecha
- 20 junio, 2022
¿Has considerado saltarte el entrenamiento porque está haciendo demasiado frío o demasiado calor? Para nadie es un secreto que hacer ejercicio con un clima fresco es mucho más cómodo que hacerlo cuando hace calor. Sin embargo, ambos climas ofrecen beneficios para tu rutina deportiva, solo tienes que conocer las pautas para llevarlos a cabo de forma correcta. Aquí te explicaremos cuáles son.
Hacer ejercicio cuando hace frío
A diferencia del calor, una de las consecuencias del frío es que nuestros músculos se contraen y se ponen rígidos para aumentar la temperatura corporal y contrarrestar el clima del exterior. Además, para mantener el flujo de aire y líquidos corporales que el ejercicio ocasiona, nuestro organismo activa procesos que también consumen energía. Todo eso tiene como consecuencia que se quemen más calorías y, en el largo plazo, sea posible que adelgacemos mucho más rápido.
El inconveniente es que, por la misma condición que adoptan los músculos cuando perciben el frío, es mucho más probable que ocurran lesiones musculares. Por este motivo, debemos darle la importancia y el tiempo debido al calentamiento previo, esto hará que nuestros músculos se adapten progresivamente, se facilite el flujo sanguíneo y se eviten lesiones.
Otro aspecto que debemos considerar a la hora de hacer ejercicio cuando hace frío es la ropa. Solemos pensar que es necesario cubrirnos con muchas capas, la cuestión está en que, una vez empecemos a sudar, toda esta ropa puede quedar mojada y no solo es incómoda de llevar, sino que nos podría dar mucho más frío por la humedad. Utiliza ropa térmica o que esté pensada, específicamente, para este tipo de actividades, que sea ligera y permita la evaporación adecuada del sudor.
El entrenamiento en estas condiciones no se recomienda para personas inmunodeprimidas, con asma u otros problemas respiratorios.
Hacer ejercicio cuando hace calor
Es muy probable que los días despejados y soleados sean los favoritos para hacer ejercicio en exteriores. Sin embargo, debemos considerar varias pautas para que el calor no se vuelva en nuestra contra:
- Los lugares que escojamos para hacer ejercicio cuando hace calor deben ser ventilados y frescos. Si lo hacemos en exteriores, se recomienda no escoger las horas en las que el sol está más fuerte (entre las 11 am y las 2 pm).
- Nuestra ropa debe ser fresca, transpirable y de secado rápido.
- La hidratación es importante. La recomendación es beber agua dos horas antes del entrenamiento, reponer líquidos durante el entrenamiento (si éste es menor de una hora) y consumir bebidas isotónicas (si haremos más de una hora o será de alta intensidad). Finalmente, se debe consumir agua una hora después de haber terminado.
- Proteger nuestra piel con sombreros, gafas y protectores solares resistentes al sudor y de larga duración (sin olvidar la reaplicación cada 2-3 horas).
Si bien todos sabemos que el ejercicio físico ofrece múltiples beneficios sin importar las condiciones climáticas, su intensidad, periodicidad y condiciones deben estar determinadas por el alcance físico que puede llegar a tener cada individuo. Cuando todos siguen las mismas recomendaciones sobre estos aspectos, no se está teniendo en cuenta las capacidades y posibilidades individuales.
Hacer ejercicio cuando hace frío o calor no determina 100 % de su efectividad. No debemos olvidar la alimentación y el descanso. A partir de todo lo anterior, el mejor consejo que podemos dar es aplicar el entrenamiento progresivo. Lo importante es dar a nuestro cuerpo las herramientas que necesita para funcionar de la mejor manera y, si es necesario, buscar apoyo en profesionales nutricionistas o entrenadores.